Volver a escribir después de tanto tiempo, me vuelve a parecer una locura.
Un escape de la mente, o de la mente a la pantalla. No es fácil salir de uno mismo. Escaparte. Hace tiempo quería hacer esto, pero no hay contenido alguno. Solo un poco de contención mental.  

Volver a viejos hábitos, normalmente es malo. Normalmente esta mal volver a repetir el pasado, volver a chocarte con las mil paredes que esquivaste. Pero... esto, esto no es un mal habito. 

Recorriendo mi mente hoy no encuentro nada. O si, un poco de inestabilidad, sin poder encontrarme, sin poder escucharme, sin poder escuchar, sin poder ver, creer. Sin estabilidad. Un poco perdida, quizás. Un poco de llantos, sin sentido alguno, solo para desahogar el alma, cuando el vaso esta medio lleno, comienza a rebalsar. 

Puedo decir mucho, y al mismo tiempo decir nada, puedo pensar mucho, y al mismo tiempo no decir absolutamente ni una palabra, puedo volar en imaginación, y claramente no voy hacer lo que quiera, completamente me bloqueo en todos los sentidos. Que fácil se me hace, hacer reír a la gente, y que difícil se me hace, hacer reír mi alma. Cada vez pensando menos en mi. Si armarme, sin amarme, sin escucharme, sin verme, sin cuidarme. Desvaneciendome en mi nada. Crucificando mi mente a cada paso dado.

Que belleza absoluta era esa sensación que te daba cuando alguien te recordaba lo asombrosa que eras imaginando,  haciendo lo que creías que querías sin que nadie te cuestionara tus pequeños logros, que fabuloso era esa pequeña libertad de expresion.  Siendo que hoy ya no es lo mismo, hoy ya nadie te escucha, hoy todos tienen problemas, hoy todos te los transmiten, hoy nadie te acompaña, nadie ríe, nadie oye, nadie festeja, hoy ya no hay imaginación, hoy la mente murió, murió para todos.

Se cierran oportunidades, se cierra la vida, se cierra la mente.